Los peritos de la División de Investigación Criminal (Divincri), la Oficina de Investigación Criminal (Oficri) y el Ministerio Público se congregaron desde las 6:00 de la mañana en las afueras del módulo 4-B, ubicado en la calle Los Colibríes, en la urbanización Los Pinos, lugar hacia donde los guiaron las hipótesis que se confirmaron al producirse el macabro hallazgo.
Los vecinos y curiosos que transitaban por la zona, así como los inquilinos de los pisos superiores, parecían no comprender lo que sucedía alrededor, hasta que, al promediar las 7:40 a.m., y tras sólo cavar poco menos de metro y medio de profundidad, desenterraron, envuelto en bolsas de polietileno protegida con mantas, el cadáver ya descompuesto de Ávila Vereau.
La zona acordonada por los efectivos policiales, no permitía el paso a los fisgones que, a su manera, interpretaban los sucesos, y se formulaban variadas hipótesis sobre el caso. Sin embargo, para la policía, las cosas, las circunstancias, las presunciones y los resultados, estaban claros. Durante más de dos horas, los investigadores policiales tomaban cuenta de lo hallado, mientras se esperaba la orden fiscal para efectuar el levantamiento del cadáver.
Sin embargo, hasta esa hora se desconocía si el cuerpo correspondía plenamente con el de Kory, aunque todo lo indicaba así.
CONFIRMARON SU IDENTIDAD
La jornada para los efectivos del orden, no obstante, no culminó con este hallazgo. Al promediar las 10:00 de la mañana, los miembros de la Divincri se dirigieron hasta la vivienda de Henry Alzamora Lambert, quien hasta hace unos días era señalado como testigo clave y cuya situación fue volviéndose desfavorable a medida que aparecían más indicios que lo incriminaban.
El sujeto fue abordado al interior de su propia vivienda, situada tan sólo a pocos metros del hogar de la fallecida y, al parecer, no opuso resistencia. Sin embargo, tras sacarlo del inmueble, mostraba algunas marcas, presumiblemente, de bofetadas propinadas por algún familiar. Alzamora Lambert fue subido a uno de los vehículos policiales en medio del desorden general y la expectativa e indignación de los deudos de Kory, la prensa y los curiosos de la zona. .
Minutos después, fue ingresado al interior del complejo policial Alcides Vigo Hurtado, ubicado en la urbanización San Andrés, donde se le sometía a un intenso interrogatorio. En tanto, el cadáver fue trasladado hasta el Instituto de Medicina Legal de la provincia de Ascope. La comitiva partió junto con Miluska Ávila Vereau, hermana de la joven, quien confirmó que el cuerpo hallado en Los Colibríes era el de Kory Tyka.
UN SEGUNDO DETENIDO
Al cierre de esta edición, y determinadas ya las causas del deceso de Kory así como confirmado el asesinato, efectivos del orden detuvieron a un segundo sujeto que estaría implicado. Aunque su identidad no fue revelada por motivos de la investigación policial, se supo que entre Henry Alzamora y él, existe un nexo amical. (La Industria).
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