El mexicano nació un 2 de setiembre en Ciudad de México y hoy cumpliría 88 años. Un recuerdo de sus interpretaciones
Aquel bigote tan bien conjugado con sus berrinches y rabietas, ese histrionismo con que empapaba cada una de sus escenas y el cariño que despertaba en el inmenso público televidente no eran características exclusivas de su personaje más adorado y difundido: “Don Ramón”.
Quizás, a sus 88 años, Ramón Valdes creería injusto que se le recuerde solo por ser el papá de la Chilindrina. Al igual que sus hermanos ‘Tin tán’, el ‘Loco’ Valdés y Antonio ‘el ratón’ Valdés, Ramón llevó en la sangre el arte de hacer reír a los demás y lo demostró inmortalizando una importante cantidad de personajes. Y a muchos de ellos los mostró en las secuencias de Chespirito, su amigo y otra genial personalidad de la comedia que supo explotar sus cualidades hasta que la muerte lo silenciara.
En “Los supergenios de la mesa cuadrada”, Valdés empezó a destacar como el divertido Ingeniebrio Ramón Valdes Tirado Alanis, uno de los panelistas que, junto con La Mococha Pechocha, el Dr. Chespirito Chapatín y el Profesor Rubén Aguirre Jirafales hacían de las suyas respondiendo correspondencia de sus televidentes. No había programa en que el personaje de Ramón llegase sin unos tragos encima.
En “El Chapulín Colorado” también era protagonista. Generalmente, Valdés era villano, encarnando a temibles sujetos como el ‘Tripaseca’, en varias ocasiones líder de una banda mafiosa integrada por personajes tan torpes como su jefe (el ‘Cuajináis’, el ‘Shory’ o la ‘Minina’). Del mismo modo, era en otros episodios el fiero Rascabuches, que con su sola presencia hacía huir a todos los vaqueros del viejo oeste. ‘Super Sam’ era la excepción: este personaje de Ramón era un peculiar superhéroe estadounidense cuyo símbolo era el dólar y competía por las hazañas con el Chapulín. “No queremos superhéroes importados”, le solían decir.
En el ‘sketch’ “Los Caquitos”, Ramón Valdés era el ‘Peterete’, liderando esa ingenua banda de a dos junto a su amigo ‘Chómpiras’. ¿Cómo no recordar típica aparición, con su peculiar forma de caminar al ritmo del jazz de “La Pantera Rosa”?
Acompañaba también al Chapulín en algunos capítulos representando a Chimpandolfo, un cavernícola que el pintoresco superhéroe intentaba enseñar a comportarse. En el ‘sketch’ de “Los Piratas”, Valdés también fue antagonista como el pirata Alma Negra, siendo el jefe de todos los corsarios de los siete mares. Este divertido y torpe líder se jactaba de haber matado al Mar Muerto y aterraba con sus risas malévolas.
Fue una gama de magistrales interpretaciones que hicieron inolvidable a Ramón Valdés. En su cumpleaños número 88 y más de dos décadas de su muerte, continúa siendo uno de los personajes mexicanos más querido en todo el mundo.
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