Sumó ocho puntos en la intención de voto en menos de un mes y ya lidera las preferencias en Lima. Es percibido como el candidato más transparente y menos agresivo. Cambió las aguas de la exclusiva playa Bujama por las de Agua Dulce, tomó con mucho humor que una chalaca le tocara los genitales, bailó reggaeton en televisión con su ya famoso PPKuy, puso en venta su casa de playa para solventar su campaña electoral y se convirtió en un religioso tuitero.
Envía mensajes telefónicos al electorado explicando sus propuestas, asegura que sabe “cómo hacerlo” y que no es un voto perdido, comparándose incluso con el Alberto Fujimori de 1990 y con la alcaldesa Susana Villarán, acaso la outsider de los últimos comicios municipales.
¿Le valió esto a PPK para ser el candidato presidencial que más ha subido en los sondeos, de 6% a 14% en menos de un mes según Ipsos Apoyo, y de 12% a 21% en Lima, posicionándose como el favorito en la capital?
Según este sondeo, sumó a su favor la percepción de que tuvo un desempeño sobresaliente en los dos debates electorales realizados hasta el momento. Los electores también creen que su campaña es la más limpia y transparente (20%) en comparación del resto.
EL MENOS AGRESIVO
Su estrategia es percibida, además, como la menos agresiva. Esto último quizás porque prefiere responder alusiones antes de ser el primero en lanzar el dardo. “Si me pican, yo pico”, ha dicho. Eso pasó con el reciente intercambio mediático de adjetivos con su otrora jefe Alejandro Toledo. De tiendas Peruposibilistas le han dicho desde mentiroso hasta que ya padece Alzheim
er.
Y pese a que el fujimorismo ya lo tildó de ser el nuevo candidato de los ricos, para el electorado consultado por Ipsos Apoyo su campaña es percibida como la menos costosa.
El ex ministro de Economía también ha apelado en estas últimas semanas a su condición de hijo de un médico migrante y una maestra, y “sacó de la manga” a su simpática esposa, quien no dudó en intercambiar un beso público con la chalaca en cuestión.
FLAUTA Y CORNEJO
La estrategia en provincia parece estar funcionándole también. PPK aparece en escena con su flauta y ofrece al público huainos como el tradicional “Ojos azules”. Minutos después presenta al conocido motivador mexicano Miguel Ángel Cornejo. Ambos le dicen a la gente, en resumidas cuentas, que “el gran cambio empieza por uno mismo”.
LAS DEBILIDADES
De pasar a segunda vuelta, PPK solo le ganaría a Ollanta Humala, que también va en ascenso. En
tre las debilidades que aún arrastra figuran su doble nacionalidad, su nulo arrastre en los sectores D y E, y el calificativo acuñado de lobbista de intereses foráneos.
En un principio el candidato precisó que renunciaría a su nacionalidad estadounidense de llegar a la segunda vuelta. Luego dijo que no pondría condiciones y que ya había solicitado los formularios para iniciar el trámite. Lo último que comentó es que este está en marcha, pero toma su tiempo. ¿Cuánto? No lo ha aclarado, lo que genera válidas suspicacias entre sus detractores.
En una reciente entrevista negó haber sido lobbista cuando fue ministro de Economía y contó que ha renunciado al directorio de dos compañías extranjeras y solo permanece en el de una holandesa-alemana.
¿Qué hará para convencer al D y E? Estamos a veinte días de los comicios
y todos los analistas coinciden en que ningún candidato tiene garantizado su pase a la segunda vuelta. Sin embargo, PPK sigue confiado: tiene a su cuy mágico que le está dando resultados.
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