A los paisanos y amigos que retornan, a los que vienen cada año, a los que el tiempo y las distancia los separo llevando en sus corazones los recuerdos vividos, del Cacañan, el Chupichaca; las entrañables noches de novenas; el pan de casa y el jamón serrano, con los rosarios cargados de devoción y de fe a la SANTISIMA VIRGEN DE LA ALTA GRACIA y al TAITA PANCHO.
A los amigos que nos visitan por primera vez en esta tierra, su tierra; queremos expresarles un saludo cariñoso del pueblo huamachuquino, de los que habitamos en esta tierra, mística reconocida como tal desde los wuamachucos antes de los incas, como una cultura que entendió perfectamente la naturaleza y las fuerzas telúricas que la rigen y que bajo la tutela de los apus, el oráculo de Catequil, supo canalizar la energía de la Mama Pacha , para curar el alma, alejar el dolor, la tristeza, calmar la ira de los dioses y fecundar sus campos .
Que en su estadía sientan el efecto energizante de tu majestuoso Huaylillas, el apu de Cushuro, Sausacocha, Collashgón, Cahuadan; puedas disfrutar de los baños de Yanasara, la trucha de barro y los cuyes asentado con un buen vaso de chicha y te sientas acogido por el calor y hospitalidad de nuestra gente. Y si pides con fe la MAMITA DE LA ALTA GRACIA te lo concederá. No hay nada imposible para la madre del hijo de Dios. Que pasen una feliz estadía, en el 458 aniversario de Creación Española de Huamachuco.
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