Ser madre no significa ser buena gobernante democrática

La directora de la ONG Manuela Ramos, Jennie Dador reflexiona acerca del rol de las madres en la actualidad y critica a la candidata de Fuerza 2011, Keiko Fujimori por el uso de la imagen de madre para llegar a la presidencia del Perú. Vanessa Herrera  @vaneherrera100
Dador reclama más atención para aquellos problemas que sufren las madres de hoy: feminicidio, violencia familiar y la falta de igualdad de oportunidades. Asimismo hace notar que la responsabilidad de las labores en casa y los derechos laborales deben ser los mismos, tanto para hombres como para las mujeres.
También aprovechó el contacto con la prensa para criticar la campaña de la lideresa de Fuerza 2011, Keiko Fujimori, quien  publicita su candidatura a la presidencia (en estos últimos días) con el eslogan: “Como madre, me comprometo...” Respecto a ese tema, Dador comenta que ser madre no es garantía de que será  buena gobernante.

¿Qué tanto ha cambiado el rol de la madre en estos tiempos?
Antes el rol de la mujer era ser únicamente madre, ahora es mujer, madre, amiga, política, tiene múltiples roles. Lamentablemente aún tenemos el estereotipo de la madre que es casi sacra. En la campaña electoral he visto que una candidata mujer dice: “Yo como madre me comprometo…”, no lo hace como gobernante o como letrada sino como madre. La maternidad no te habilita como gobernante democrática.
¿Se refiere a Keiko Fujimori?
Sí, el partido que ella representa se encargó de las esterilizaciones en los años 90. Unas 300 mil mujeres fueron esterilizadas a la fuerza en la sociedad peruana, afectando principalmente a las mujeres pobres e indígenas. Me parece malo que ella invoque al electorado como madre; usar ese argumento es absurdo, y no es garantía de nada.

Oportunidades y responsabilidades compartidas
Las mujeres que son amas de casa y trabajan a la vez, ¿cómo desempeñan su función de madre?
Se puede lograr ese doble trabajo pero tiene altos costos para su salud mental, pues las vuelve ansiosas, estresadas, el tiempo no les alcanza y están cansadas físicamente. En el trabajo a veces se les ve como problemáticas. Las mujeres ganan 30% menos que un varón en el mismo trabajo y con las mismas calificaciones. Además el ausentismo laboral se da con mayor incidencia en las mujeres, porque el hombre no asume ni el trabajo doméstico ni la crianza de los hijos. Hoy nuestra demanda es que hombres y mujeres se dediquen al trabajo doméstico.
Si bien la mujer ha conquistado ya diversos espacios, ¿cómo solucionar el tema de la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres?

Hablamos de una discriminación histórica, nadie dice que el Estado proponga mensajes de cambios culturales, pero sí de una política de servicio, dirigido hacia madres y padres. Por ejemplo, el servicio de cuidado infantil se dirige a la madre, acaso ¿los hombres no tiene hijos? La responsabilidad, el cuidado y la crianza recae en el hombre y en la mujer. Debe haber una corresponsabilidad en la jornada doméstica como en otros países de la región como Chile, México.

¿Se tiene cifras o porcentajes de cuántas mujeres son jefas de hogar?
Sí, según las cifras del INEI del 2009, un millón 689 mil 116 madres de todo el país ejercen la jefatura de sus hogares. Adicionalmente, se registra una mayor presencia de madres jefas de hogar en el ámbito urbano (25,7%), en relación con el área rural (21,4%).
Las mujeres de provincia

Y en el caso de las mujeres del ande, ¿las cosas han mejorado para ellas?

Las mujeres estamos en un contexto de discriminación de género. En el caso de ellas que viven en el campo, se las discrimina aún más: por ser pobre, por ser andina, viven en desigualdad y en peores condiciones que nosotras. Y a pesar  que los últimos datos señalan que la pobreza ha descendido en el Perú, la rural no ha disminuido ni en un 1 %. Ellas tienen menores posibilidades de servicios básicos, y hay menos presencia del Estado en dicha zona. Es una pena que el Perú a pesar del crecimiento económico, su tasa de muerte materna es de 103 decesos por cada 100 mil nacidos vivos, cifras similares a países como Haití y Bolivia; eso muestra que aún falta mucho por hacer.


Los tres problemas principales que afectan a una mujer (o a una madre) es el feminicidio, la violencia familiar y la falta de igualdad de oportunidades, ¿cuál de todos ha disminuido y ha incrementado?
Ninguno de los tres ha disminuido. En el caso del feminicidio los datos se mantienen. Hasta marzo de este año el Centro de Emergencia Mujer ha registrado 27 feminicidios, en el 2010 un total de 117 feminicidios, y en el 2009, 135 feminicidios, eso significa que han quedado 144 huérfanos. En cuanto a la violencia familiar ha habido un pequeño descenso, el promedio nacional de mujeres violentadas por su pareja (conyugue e o conviviente) es de 38% a nivel nacional (INEI, 2010).

¿Cuántas mujeres deciden no ser madres y se someten el aborto en lo que va del año?
No hay cifras exactas, pero sí estimados. Según las últimas cifras, un promedio de 350 mil abortos se realizan al año a nivel nacional.

Para concluir ¿Qué mensaje le puede dar a las madres en su día?
Lo primero que les diría es que se sientan plenas, que se sientan bien consigo mismas. Las madres van a dar amor y a cuidar a otros, por ello en la medida en que piensen más en su propio cuidado, van a poder dar más y mejores cosas a sus hijos, y sobre todo pedirles que no fomenten en sus hijas el modelo de la opresión por parte del hombre.