Santos, una joven que ahora tiene 22 años, vive la peor pesadilla de su vida. Desde los 12 años fue violada por la persona que considero su padre y su hermano, quien la adopto desde la edad de 6 años.
La menor fue entregada a Gumercinda López Castillo, en sector de Cancubamba del caserío de El Progreso distrito de Chugay, debido a que su padre murió y su madre dejó el lugar para hacer una nueva vida con otro compromiso.
Según indica la joven en una manifestación que dio a los integrantes de la ronda de El Progreso, es que siempre le hacían recordar que ella había sido vendida y es por eso que tenían todo el derecho a maltratarla y ser considerada como una sirvienta.
Ella indica que los años iban pasando y ala edad de 12 años fue violada por Virgilio Otiniano López. “Yo suplicaba que no me maltrate, que no abuse de mi persona, pero me pegaba y me amenazó que me seguiría golpeando si yo decía algo y por el temor, me quede callada”.
Posteriormente indicó que a la edad de 19 años, también fue abusada sexualmente por otro integrante de la misma familia, se trata de Aldemar Otiniano López, quien también la amenazo con pegarle si decía algo, ella igual se quedo callada.
Producto de esta violación, Santos salió embarazada. Al enterarse, la supuesta madre adoptiva, luego de golpearla, la llevó a una comadrona en el caserío de San Francisco, quien le dio a beber un brebaje que provocó un aborto.
La joven no resistió más el abuso sexual y recurrió a las rondas campesinas del El Progreso, quienes de inmediato, la acogieron y protegieron. Pero los inmorales y actores del abuso sexual, llegaron hasta Huamachuco, y denunciaron a la ronda por secuestro de la joven ultrajada.
Ellos al enterarse de lo sucedido, llegaron a Huamachuco y respaldados por las rondas urbanas, exigieron que la justicia sea transparente y legal. El presidente del ronda campesina de El Progreso, Pablo Rodríguez Morales, indicó, que exigen, la detención de las personas que abusaron de Santos, y que les caiga todo el peso de la ley o de lo contrario ellos tomarán sus medidas radicales, contra esta familia. “Le han hecho un daño psicológico a la joven, que también es rondera, no permitimos el abuso contra nadie, sino nos hacen caso, las autoridades de la ley, lo haremos nosotros con las medidas disciplinarias que tenemos”.
La menor fue entregada a Gumercinda López Castillo, en sector de Cancubamba del caserío de El Progreso distrito de Chugay, debido a que su padre murió y su madre dejó el lugar para hacer una nueva vida con otro compromiso.
Según indica la joven en una manifestación que dio a los integrantes de la ronda de El Progreso, es que siempre le hacían recordar que ella había sido vendida y es por eso que tenían todo el derecho a maltratarla y ser considerada como una sirvienta.
Ella indica que los años iban pasando y ala edad de 12 años fue violada por Virgilio Otiniano López. “Yo suplicaba que no me maltrate, que no abuse de mi persona, pero me pegaba y me amenazó que me seguiría golpeando si yo decía algo y por el temor, me quede callada”.
Posteriormente indicó que a la edad de 19 años, también fue abusada sexualmente por otro integrante de la misma familia, se trata de Aldemar Otiniano López, quien también la amenazo con pegarle si decía algo, ella igual se quedo callada.
Producto de esta violación, Santos salió embarazada. Al enterarse, la supuesta madre adoptiva, luego de golpearla, la llevó a una comadrona en el caserío de San Francisco, quien le dio a beber un brebaje que provocó un aborto.
La joven no resistió más el abuso sexual y recurrió a las rondas campesinas del El Progreso, quienes de inmediato, la acogieron y protegieron. Pero los inmorales y actores del abuso sexual, llegaron hasta Huamachuco, y denunciaron a la ronda por secuestro de la joven ultrajada.
Ellos al enterarse de lo sucedido, llegaron a Huamachuco y respaldados por las rondas urbanas, exigieron que la justicia sea transparente y legal. El presidente del ronda campesina de El Progreso, Pablo Rodríguez Morales, indicó, que exigen, la detención de las personas que abusaron de Santos, y que les caiga todo el peso de la ley o de lo contrario ellos tomarán sus medidas radicales, contra esta familia. “Le han hecho un daño psicológico a la joven, que también es rondera, no permitimos el abuso contra nadie, sino nos hacen caso, las autoridades de la ley, lo haremos nosotros con las medidas disciplinarias que tenemos”.
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