viernes, 30 de septiembre de 2011

LA TENTACIÓN DE LOS PERIODISTAS

En el mundo no existe fecha definida desde cuando apareció este preciado oficio para algunos, vocación para otros, es contemporáneo a la existencia del hombre en este mundo. La historia solo registra los que sacaron un título después de un perfeccionamiento profesional. La esencia del periodismo se basa en trasladar la información de los poderes de los gobiernos hacia la ciudadanía, el intercambio de opiniones y reflexiones generando debates públicos, democratizando la toma de decisiones, aportando a la búsqueda de una verdadera democracia: gobierno del pueblo.  Las mejores herramientas y armas de los periodistas y comunicadores es la libertad, la verdad y la ética. Ello implica una sólida formación de principios humanísticos con una capacidad férrea e inquebrantable para llamar a las cosas por su nombre. El mundo ha cambiado desde que apareció el periodismo, cuantos gobiernos corruptos y violadores de los derechos humanos han caído.
El periodismo necesita coraje, valentía para enfrentar las más duras persecuciones, amenazas, amedrentamientos y muerte. El periodismo es la  más noble de las profesiones, pero también mal ejercido llega a ser el más vil de los oficios dado que los periodistas caen en la tentación tener miedo a los poderosos, a los que manejan el poder con dinero y amenazas. El periodista puede callar, manipular y manejar tendenciosamente la información. Por eso es que el francés Serge Halimi cuando habla de los Periodista y el Poder, el dice con toda verdad que los periodistas, son los  nuevos perros guardianes del poder. Aunque parezca dura la descripción pero en ciertas oportunidades se llega a eso. Por tal razón nosotros los periodistas de Huamachuco, nos toca ponernos a reflexionar y si fuese posible a corregirse si hemos caído en esta horrenda tentación. 

Es mejor la libertad y la verdad. No prostituyamos al periodismo, con valentía vayamos a difundir nuestras informaciones y con coraje a investigar allá en la oscuridad de la vuelta de la esquina, que la publicidad de los gobiernos locales no nos hagan callar, por el contrario que ellos nos busquen si es que consideran que en nuestros espacios pueden difundir estratégicamente sus planes y acciones de gobierno.

Por: Antonio Campos Castillo.

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